Más de 30.000 soldados afganos murieron desde 2015, dice presidente Ghani
La cifra de muertos entre los integrantes de las fuerzas de seguridad de Afganistán se aproxima a 30.000 desde comienzos de 2015, dijo el presidente afgano Ashraf Ghani, una cifra mucho más alta que las anunciadas hasta ahora.
Ghani apareció a través de un enlace de video esta semana en la Escuela Johns Hopkins de Estudios Internacionales Avanzados de Washington, parte de una universidad en la que una vez enseñó como profesor de antropología.
Desde el inicio de 2015, cuando la policía local y las unidades del ejército sucedieron a la OTAN como responsables de la seguridad en Afganistán, “28.529 soldados de nuestras fuerzas de seguridad perdieron la vida y se convirtieron en mártires de nuestra libertad”, dijo Ghani.
En el mismo período, 58 estadounidenses fueron asesinados.
“Me gustaría saludar el patriotismo de los integrantes de las fuerzas de seguridad afganas, cada uno de los cuales es un voluntario”, dijo Ghani.
“No tenemos servicio militar obligatorio, nadie está obligado, y si no hubiera un impulso patriótico, no creo que la gente sacrifique sus vidas por una paga de 200 dólares”.
El ritmo al que perecen los soldados afganos ilustra la fragilidad de la situación de seguridad del país, así como la fuerza de los talibanes, y suscita dudas sobre las afirmaciones de Estados Unidos de que las tropas afganas se están convirtiendo en una fuerza de combate cada vez más efectiva.
En 2015, aproximadamente 5.000 soldados de las fuerzas de seguridad afganas murieron y otros 15.000 resultaron heridos.
El número de víctimas aumentó en 2016 y parece haberse acelerado nuevamente en 2017 y 2018, lo que contradice una afirmación en del general John Nicholson, quien recientemente se retiró como jefe de la OTAN y de las fuerzas estadounidenses en Afganistán.
En noviembre de 2017, Nicholson dijo que las tasas de bajas entre las fuerzas de seguridad afganas habían comenzado a disminuir a medida que Estados Unidos aumentaba el ritmo de los ataques aéreos contra los talibanes.
En un reciente informe, la Inspección General Especial de Estados Unidos para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR) citó a la misión de la OTAN en Kabul diciendo que el número de víctimas de este verano boreal ha sido el peor de la historia para las fuerzas afganas.
“Entre el 1 de mayo y el 1 de octubre de 2018 el número promedio de bajas que sufrieron (las fuerzas afganas) es el mayor que haya habido en períodos similares”, indicó SIGAR. Mattis dijo este mes que más de 1.000 “muchachos afganos” murieron o resultaron heridos en agosto y septiembre.
A más de 17 años de la invasión de Afganistán liderada por Estados Unidos el conflicto continúa, aunque Washington está tratando de salir de la guerra.
