El jefe del grupo EI en Yemen es capturado por fuerzas especiales (coalición)
El jefe del grupo yihadista Estado Islámico en Yemen fue capturado durante una operación a principios de junio de las fuerzas especiales sauditas y yemeníes, anunció el martes la coalición militar que lucha contra los insurgentes hutíes.
Conocido como Abu Osama al Muhajir, fue detenido dentro del territorio yemení junto al responsable de finanzas y otros miembros del grupo, indicó el portavoz de la coalición en un comunicado difundido por la agencia saudita SPA.
Las fuerzas especiales sauditas en colaboración con las yemeníes “llevaron a cabo una exitosa operación que resultó en la captura del líder de la filial en Yemen de Dáesh (EI), Abu Osama al Muhajir”, dijo el vocero, el general saudita Turki al Maliki.
Según Maliki, el operativo fue realizado el 3 de junio y solo duró diez minutos.
“Una casa mantenida bajo estrecha vigilancia demostró albergar al líder del grupo terrorista y otros responsables, junto con tres mujeres y tres niños”.
Maliki no precisó el lugar exacto en el que se llevó a la cabo la operación.
La identidad del “emir de Dáesh” en Yemen era poco conocida hasta ahora.
Fotografías del operativo difundidas por las autoridades sauditas mostraron hombres con los ojos vendados y esposados en manos de soldados.
Se incautaron armas, municiones, ordenadores portátiles, dinero en efectivo en varias divisas y aparatos de sistema de posicionamiento global GPS, dijo Maliki.
Según él, se hizo todo lo posible para reducir los efectos colaterales de la operación.
Las tres mujeres y los tres niños, así como civiles que vivían cerca de la casa objetivo del ataque, no fueron afectados.
El Estado Islámico se implantó en Yemen aprovechando el conflicto que se inició en 2014 entre el gobierno y los rebeldes hutis y se asumía como concurrente de Al Qaida, que tenía una presencia previa.
El grupo reivindicó varios atentados espectaculares en este país sumido en la guerra, entre ellos un ataque en Saná a inicios de julio de 2015 (28 muertos) y otro contra una cuartel en Adén (sur) que costó la vida a 35 soldados en diciembre de 2016.
Este país pobre de la península arábica, de donde es originario el ex jefe de Al Qaida Osama bin Laden, era antes el bastión de este grupo yihadista.
